"Los rociadores automáticos me salvaron de perder todo lo que tenía"

"Los rociadores automáticos me salvaron de perder todo lo que tenía"

Vos también podes prevenir, antes de lamentar las consecuencias de un incendio.

Era viernes por la tarde y la semana de trabajo estaba llegando a su fin. El encargado de planta se encargó de cerrar todas las puertas antes de abandonar la fábrica y de conectar la alarma para garantizar la seguridad del lugar.

Se fue tranquilo creyendo que la industria estaba protegida. Lo que no sabía es que el peor enemigo iba a surgir desde su propio interior.

“Una vieja instalación eléctrica en el depósito generó un cortocircuito que desembocó en un incendio”, de esta manera recuerda Carlos Romero el siniestro que sufrió su fábrica de plásticos, hace tres años atrás.

Como ya no quedaba personal en la planta, nadie advirtió la presencia del fuego. “Fue el sistema fijo de detección y extinción de incendios lo que salvó la infraestructura del lugar, mi trabajo y el de todas las familias que viven de esta industria”, reconoce con alegría, mientras camina por el taller, rodeado de empleados.

Los rociadores contra incendios detectaron el aumento de la temperatura ambiente y expulsaron el agente extintor que sofocó el fuego e impidió que se propague, evitando la destrucción total del lugar.

Estos dispositivos se activan a través del calor generado por el fuego, el cual hace que estalle la ampolla de cierre y se descargue el agua sobre el foco de incendio. A su vez, se complementan con el resto de las instalaciones fijas, como los detectores y la alarma contra incendios.

“Muchas veces me pongo a pensar que podría haber pasado si los rociadores automáticos hubieran funcionado mal o si simplemente nunca los hubiéramos instalado, el resultado sería aterrador”, reflexiona Carlos.

La Resolución Nº 263/AGC/2017 indica que todos los establecimientos ubicados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires deben realizar el mantenimiento periódico de sus instalaciones contra incendio.

Solo pueden hacerlo mediante una empresa habilitada por el GCBA para realizar las obras y el mantenimiento de acuerdo al nivel de instalación que posean.

En MaxiSeguridad contamos con una unidad de negocio liderada por ingenieros y técnicos expertos en el área, dedicada exclusivamente al diseño, la instalación y el mantenimiento de las instalaciones fijas contra incendio.  

Como el uso de las mismas es eventual, es fundamental realizar su mantenimiento periódico. Esto permite solucionar cualquier falla a tiempo, garantizar su constante operatividad y una respuesta eficaz frente a un eventual incendio.

“Yo era de los que creía que no era necesario recargar los matafuegos y lo hacía solo por obligación. Desde que me pasó esto, dejé de ver a la seguridad contra incendios como un gasto, ahora puedo asegurar que es una inversión que te salva la vida y evita que pierdas todo de un segundo a otro”, concluye aliviado, mientras retoma con tranquilidad su rutina de trabajo.  


"Los rociadores automáticos me salvaron de perder todo lo que tenía"