Alarma de incendio

La alarma de incendio cumple un rol fundamental al momento de evacuar un ambiente. Tras detectar la presencia de humo, emite una señal acústica y anuncia de esta manera el inicio de un siniestro.  

La alarma de incendio advierte el peligro a las personas presentes en el lugar y evita accidentes al lograr que lo abandonen de inmediato.

Este dispositivo forma parte de un sistema de detección, que puede descubrir el fuego sin intervención humana.

La alarma de incendio se complementa con el resto de las instalaciones fijas. En conjunto, pueden detectar y extinguir el fuego. De esta manera, las pérdidas materiales disminuyen drásticamente y se salvan vidas.

El sistema de alarma está conectado a una central y puede dispararse mediante los detectores de humo o de manera manual. Luego emite una señal sonora o visual para avisarle a la gente presente la necesidad de evacuar el lugar.

Es necesario realizar simulacros de incendio que enseñen cómo reaccionar ante esa situación de riesgo y preparen a las personas para actuar de manera eficaz durante una emergencia.

La detección temprana de un incendio evita pérdidas irreparables. Logra que las instalaciones no se vean afectadas y que las personas no sufran quemaduras en el cuerpo o en las vías respiratorias.

La alarma de incendio cumple un rol fundamental, ya que permite descubrir el siniestro desde su fase inicial, para extinguirlo antes de que tome grandes dimensiones.